Jugando con dos perros de peluche.
—Mira, estoy escarbando con la pata.
—¿Estás haciendo un agujero?
—Sí, hay un tesoro dentro. Lo voy a abrir con mi llave.
—Muy bien. ¿Qué hay dentro?
—¡Está lleno de llaves!
—¿Qué abren las llaves?
—¡Tesoros!